PARTIDAZO DE AMBOS EQUIPOS

 ALTERNATIVAS EN EL MARCADOR PARA DAR MÁS EMOCIÓN AL PARTIDO

CALIDAD Y BUENAS MANERAS, SON EQUIPOS DE TERRENO GRANDE

1ª Alevín Ocho Subgrupo  4-A Jornada 8

FB. Sabi A. 2-2 SD. Huesca

   Árbitro: Pablo Piedrafita: Sin tarjetas. A Pablo se le complicó un poco el partido, detalles pequeños que los jugadores notan, fue un encuentro de mucho desgaste y al árbitro se le pueden escapar esos mínimos detalles que los jugadores echan en falta.

  SD. Huesca: Anoro, Nieto, Cantin, Saez, Rivas, Alastrue, Lopes, Hereza. Banquillo: Mur, Carrera.

 

     FB. Sabi: Laguarta, Rodríguez, Hernández, Pueyo, Ferrer, Martínez, Gómez, Lacambra. Banquillo: Zitoun, Bouna, Dorronsoro, Benito, Manila.

     El Partido: Bello espectáculo futbolístico de los alevines que viéndolos jugar parecen infantiles, necesitan más terreno de juego para explotar todas las característica que tiene su fútbol 

    El encuentro comenzó como una bala, los dos equipos querían ser primeros en marcar, los porteros se emplearon a fondo y las defensas tuvieron que estar muy atentas al peligro que les llegaba por las alas y por el centro. El Sabi pegó primero y un buen lanzamiento de Gómez besó la red ante la alegría de los rojiblancos, solo había pasado 8 minutos y el partido parecía controlarlo el equipo local.

    El gol avivó el espectáculo siempre controlado por los locales, pero los de la capital no se durmieron, siguieron luchando y llevando peligro a la puerta de Laguarta. Con la mínima ventaja llegó el descanso, merecido por el desgaste realizado.

   La segunda parte fue más de lo mismo dos equipos bien plantados con mucha fuerza y ganas por conseguir los tres puntos. Peligro en ambas puertas, buen fútbol y el tiempo pasa sin remedio con la ventaja mínima. El Huesca que nunca se rindió aprovechó un leve error defensivo en el 38, Hereza mandó el cuero a la red para firmar el empate. Dos minutos después, minuto 40 el Huesca marcaba el 1-2 por medio de Lopes, en ese bajón que tienes cuando encajas. Pero unos segundos después Gómez conseguía el empate, celebrado con alegría, los chavales, veían el partido perdido. 

  En  los últimos 5 minutos los equipos se controlaron, nadie arriesgaba a perder, el empate hacía justicia de lo ocurrido sobre el césped del "Joaquin Ascaso".