EL BIESCAS LO DIO TODO POR LA VICTORIA

 UNA VEZ MÁS, LA SUERTE YESQUIVA Y LA MALA PUNTERÍA LASTRARON AL EQUIPO A LA DERROTA

DYLAN ADELANTO A LOS PELAIRES, PERO LOS CASPOLINOS REMONTARON EL MARCADOR.

5º Jornada de la Tercera División de la RFEF. Grupo 17

UD. Biescas 1-2 CD. Caspe

Goles: Dylan/ Ginés 2

    Árbitro y líneas: Aquilino Fernández, ayudado por Rojas y Rammah.. En un terreno de juego como se encontraba el "Fernando Escartín" no es sencillo salir impune del trabajo, muchos factores encontra de los árbitros: La presión, dos equipos necesitados, la intensidad que pusieron en el lance, la enorme competitividad, los roces, lo resbaladizo del terreno de juego, los contactos, las caídas libres o forzadas, las pérdidas de tiempo, etc. etc.

   Pese a todo, con sus errores, el trío arbitral no suspendió. Le sucedió como al Biescas, lo dio por hacerlo bien y no supo ganar. Igual al árbitro puso todo su empeño, pero siempre hay cositas que fallas, aparte tener a dos aficiones contentas es imposible. El Biescas protesto la falta del gol del empate, simplemente comentaban que no había nada punible en la jugada, sin embargo, al Biescas le costó el gol. También una mano en el área que tampoco se sancionó, el problema en todo esto es que el criterio del árbitro es el que menda, pero siempre ha sido penalti por mano dentro del área.

  Tarjetas amarillas para Estarreado, Osanz y Marcelo. Ginés por el Caspe. 

 

       ALINEACIONES

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       UD. BIESCAS: Marcelo, Marcos, (Augustus 70'), Aso, Estarreado, Fran, Osanz, Molano Gayan, (Samper 81'), Reques, (Estella 81'), Fuller, (Miguel 54'), Dylan

       CD. CASPE: Mañez, Villanueva, Garrido, Sorbe, Burillo, (Bernad 67'), Ginés, Pescador, Pueyo, Tadeli, (Abadía 89'), Rotellar, (Fernández 79'), Navarro,

   

 

    EL PARTIDO: Que difícil es jugar con un terreno de juego en condiciones de agua y barro, incluso para los pelaires que están acostumbrados, por lo que vi posiblemente les perjudicó más a los de casa que a los rivales. 

   El equipo verdiblanco salió a por todas desde el inicio, el rival no tuvo más remedio que contestar con la misma intensidad, ni el agua, ni el barro, frenaba el ímpetu de ambos equipos, llegadas sin peligro, dificultades a la hora de pasar el balón, la solución estaba clara, patadón y a correr, pero si el cuero tocaba hierba con poca agua, salía volando y era inalcanzable, si por el contrario tocaba un charco se quedaba parada. El partido no se podía parar y se utilizaron opciones para llegar y marcar. Los puntos los necesitaban los dos y ambos lo daban todo en defensa, y buscaban los huecos para colarse directos a la portería. Cuando parecía que todo se calmaba tras el inicio un jugada por la izquierda a los 18 minutos le daba al Biescas la ocasión a Dylan en un balón que le llegó sin marca y no la desaprovechó, el balón se fue a las mallas, La alegría pelaire era indescriptible, adelantarse en el marcador en un terreno de juego poco jugable daba una gran ventaja a la huestes de Miguel Gracia, por contra el Caspe se lamentaba de la facilidad dada ante ese gol que contrarrestarlo le iba a costar sudor y lágrimas.

   Los caspolinos no se derrumbaron y volvieron a la carga con respuesta pelaire, el partido se volvió un tira y afloja con el permiso del terreno de juego que tal y como pasaban los minutos se ponía muy peligroso y difícil de controlar el balón. Cerca del minuto 40 con la ventaja local para llegar al descanso, el árbitro sanciona una falta en la línea de medios del Biescas, por cierto, muy protestada por los de casa, sobre todo por Marcelo que desde su puerta, comentaba, "Como puedes pitar eso arbi, se ha caído solo no ha habido contacto" Marcelo sabía de la peligrosidad del lanzamiento con todo el Caspe en el área del Biescas. Era el minuto 39 y el balón metido a la olla, un leve despiste y remate de cabeza de gines y el balón junto al poste a la red. Se cumplieron esos vagos presagios y el Caspe empataba el partido, cuando mejor lo tenía controlado los verdiblancos.

    Volver a empezar en la segunda parte, temor entre ambos bando un gol ahora si podría ser definitivo, El juego bajó enteros, el físico estaba muy desgastado, pero los equipos mantenían el balón más tiempo, debido a la perdida de la intensidad. se llegaba a las áreas, pero las defensas y porteros estaban muy despiertos para evitar los despiste. todos los presentes tal y como se jugaba el empate era lo más justo, pero, siempre pasa algo, dos muy buenas ocasiones del Biescas en la que Dylan remata solo con la cabeza y el balón se marcha pegado a la escuadra. Balones para los de casa sueltos para rematar, pero debido a los charcos se fallan, y mira por donde en una jugada que parecía no tener peligro, el más lista de la clase toca el balón con la ventaja defensiva y el cuero se aloja en la red ante la desesperación de Marcelo y todo el equipo, se cumplía el minuto 68 y el partido se ponía cuesta arriba.

    El Biescas lo intentó todo, sacó toda la polvora desde el banquillo para refrescar al equipo, pero el Caspe se cerro a cal y canto y ya no hubo forma de traspasar la barrera caspolina,. perder tiempo, retrasar los saques, mandar el balón fuera, lo que sucede cuando un equipo está ganado y no quiere que le empaten, estas cosas cabrean al perdedor y cuando el partido terminó Marcelo la tuvo con un rival, pero todo quedó en eso en una mirada de furia, algún empujó y al final deportivamente todos al vestuario, entre la alegría visitante y los rostros de pocos amigos de los locales. El fútbol es así, unas veces se pierde y otras se gana, pero hoy el Biescas mereció mucho más, al menos el empate como mal menor.

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