martes, 3 de marzo de 2015

LA EXPULSIÓN DE BORJA DESARMA AL SABIÑÁNIGO

CON EL 1-0 Y DOMINANDO BORJA POR UN CODAZO DEJA AL EQUIPO EN MINORÍA 68 MINUTOS

Aguantaron pero al final los zaragozanos se hicieron con la victoria

3ª División Grupo XVII jornada 27
AD. Sabiñánigo-CD. Borja   1-2


El Borja solo demostró su poderío cuando el Sabi llevaba muchos minutos con un hombre menos, si el Sabi hubiera jugado con los 11 hombres, los visitantes no hubieran tenido la facilidad para ganar por la mínima a un equipo que comenzó con una gran intensidad, pero que se fue apagando tal y como disminuía la fuerza física. Enfado y de los grandes de Dani cuando el Sabi encajó el segundo gol. El público la tomó con el árbitro Edgar García, un hombre nada positivo para el equipo roji-blanco


Toñin protagonista la semana pasada por su prueba en Valencia con el Levante


AD. Sabiñánigo.- Marcelo, Jon, Miñano, Laguarta, Toñín, Miguel, Osanz, (Rapún 75'), Ángel luis, (Eric 45'), Borja, P. Sanchez, (Guille 61'), Chata



AD. SABIÑÁNIGO

En el saludo se palpa la concentración de los jugadores




CD. Borja.- Felix, Crespo, David M., Machote, Motero, Badu, Mercadal, (Guille 66'), Roncal, Huete, (Aibar 87'), Matute, Hamza, (Marcos 85').  


CD. BORJA

Árbitro.- Edgar García ayudado en las bandas por Gainar y Enfedaque. Una vez más este Sr. no es para arbitrar al Sabi, siempre que lo hace el equipo serrablés lo pasa mal porque su arbitraje es anti-casero, el público no lo quiere en absoluto, pero el Colegio de árbitros se empeña en mandarlo para que algún día se arme un lío de los gordos. Este domingo el listón del desacuerdo ha subido bastante, su acierto en su justicia particular para el público ha sido muy negativa, y consideran la mayoría que en Zaragoza deberían tomar nota y no mandar a este Sr. a Sabiñánigo. Expulsó a Borja por un codazo a un contrario en el minuto 22 con tarjeta roja directa y amonestó con amarilla a Osanz, Fontana (banquillo) Jon, y Toñín. Por los visitantes a David, Huete y Miki Álvarez (entrenador)



Trío arbitral y capitanes


  El Sabiñánigo se las veía felices cuando el árbitro del partido sancionaba una caída de Borja en el área zaragozana con penalty y más, cuando Paco Sanchez, después de no acertar con la diana, si aprovechaba una melee posterior para marcar el primer gol de la tarde y adelantar al Sabi en el marcador. El juego del equipo era de alto voltaje y con intensidad, no daba su brazo a torcer ante un Borja que pretendía imponer su dominio, una plantilla confeccionada para el ascenso, con un alto presupuesto y con un desparpajo especial.
   En los primeros 20 minutos daba la impresión de ver a un Sabi diferente, con más coraje, más fuerza, no daban un metro a su oponente, que tenía que dar todo de si para aguantar a un equipo muy correoso y con la lección muy aprendida. Pero, todo eso se derrumbó, cuando a los 22 minutos Borja y el lateral izquierdo del equipo zaragozano, las tenían crudas, el delantero del Sabi soltaba el codo impactando en el contrario. Todo fue un segundo, el jugador serrablés en ese momento no pensó en la buena disposición del equipo, con un gol recién marcado, donde Él había sido medio autor. Borja pensó más en los golpes y bajezas que sufrió en el partido de ida donde fue el foco de los zaragozanos. Borja vino del partido de ida enfadado por todo lo que pasó en el terreno de juego y en el momento de pasar lo que pasó no creyó en las consecuencias, solo quería imponerse, no pensó en el golpe y en la tarjeta, solo quería ser dueño de la situación en su casa, pero las consecuencias no las midió, seguramente no entendió el enfado de todos por dejar al equipo con un hombre menos, pero cuando la soledad del vestuario lo acogió, se dio cuanta de la magnitud de su estupidez y estoy seguro que se arrepintió mil veces.


Borja en punta de ataque incordiando a los defensores


   El equipo momentáneamente no se resintió y siguió manteniendo a raya a los visitantes que no llegaban con peligro a la puerta de Marcelo, tampoco lo hacía el Sabi y ambos se limitaban a buscar sus opciones, pero con la salvedad que a los locales el esfuerzo les iba a costar caro en la segunda parte. En el último segundo del primer acto pudo empatar el Borja en un remate raso que dio en el palo y se paseo por la raya de gol para salir por el otro palo. 
   En el segundo tiempo el Sabi con los cambios pretendió mantener su intensidad, algo que es complicado porque la mayoría acusa el cansancio y el que sale le cuesta enchufarse al partido. Dani movió ficha quitó un centrocampista y sacó a Eric para ayudar arriba a Chata. El cambió no se notó como quería Dani y a los 55 minutos el Borja empataba con un gol de pillo de Matute, dejó sin aliento a portero y defensas al colarse ebtre todos y tocar lo justo para que el balón besara la red.
  Hubo momentos de nervios porque los borjanos llegaban con más claridad y aparecían los nervios, también aparecían las cartulinas, la frescura no era la misma y se llegaba tarde al balón, lo que conlleva la falta y amarilla, el equipo estaba atrás la presión visitante se hacía más insistente, Dani reaccionó y volvió a mover ficha, quitó a un cansado Paco Sanchez y sacó a guille un defensor de buen físico  para jugar de enganche entre las lineas y refrescar el centro de campo. A Alex Osanz también pedía el cambio por cansancio y se fue al banquillo por Rapún.


Jugada de Chata con pase a Miñano

   Los cambios casi no tuvieron su efecto por justo después del último cambio llego el gol de la victoria visitante. La subida del lateral por la banda es una autopista, nadie se le cruza ni siquiera hace una falta para pararlo, este llega casi a la linea de fondo donde mete un pase a Matute que sin ángulo de tiro, manda el balón a las mallas. El enfado de Dani es descomunal gritando a sus jugadores "no puede ser, no puede ser, cagüen ...." Era el gol devastador, era lo que nadie quería, tanto trabajo para perder un partido que era importante para los locales. Quedaban 12 minutos en los cuales el Sabi sacó fuerzas de flaqueza y se fue a por el empate, tuvo sus llegadas y los visitantes apelotonados atrás con más o menos acierto defendieron su ventaja, pero también les dio posibilidades de incrementar la ventaja, al menos en tres ocasiones se plantaron solos ante Marcelo, pero no supieron matar el partido y el Sabi buscó el empate con más corazón que cabeza hasta que el árbitro pitó el final que prolongó el partido hasta 4 minutos.
   Mal momento para el Sabi con la derrota que tendrá que ir a Utebo a ganar si o si, con alguna baja y sin Borja que al menos de dos a cuatro partidos tendrá que  guardar descanso.



Toñín y P. Sanchez










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