BLASCO CUATRO DE SEIS GOLES. ¡¡¡BRUTAL!!!
EL GOL EN EL PRIMER MINUTO ROMPIÓ AL RIVAL
UN PASEO PARA LOS DE MARCOS QUE NO TUVIERON RIVAL EN EL PARTIDO.
AD. SABI 6-0 CD. ALTORRICÓN
Goles: 1-0 Blasco 2' / 2-0 Blasco 7' / 3-0 Soria 20' / 4-0 Blasco 42' / 5-0 Blasco 62' / 6-0 Fañanas 80' /
ÁRBITROS: Rada Rammah, ayudado por Blanco y Sánchez. Sin problemas, paso desapercibido. Tarjetas amarillas para Alberto y Fañanas y Lumbierres y Ousmané.
CD. ALTORRICÓN: Sisoho, Lumbierres, Gómez, (El Asry 46'), Coker, /Alvarado 46'), Ndiaye, (Bassoum 52'), Sanz. Mbengue, Zamora, Sy, Sow, Alonso, (Elkihal 64').
AD. SABI: Leo, (Otín 75'), Grasa, (Ibra 46'), Alcoba, (Richi 67'), Aso, Soria, (Fañanas 67'), Iván, Cano, Dylan, Nico, Alberto, (Paúles 60'), Blasco.
EL PARTIDO: Se preveía un partido comprometido de mucho físico por el estilo del rival, pero no fue así, un gol de Blasco al primer minuto de juego rompió los esquemas visitantes, aunque intentó recuperar, el partido se le fue de las manos, cuando a los siete minutos un balón a la espalda de la defensa de Grasa a Blasco , este se zfa de su marcador, cuando el meta buscaba el balón en su salida, un vaselina de las que te dejan clavado, eleva el segundo gol al marcador y el cierre del partido para los verdes, no es que dejaran de luchar, pero subir una cuesta cargado con 100 kilos, no es lo mismo que subirla sin carga.
La única ocasión para el Altorricón llegaba en el minuto 75 cuando Ndiaye remató alto un balón desde el punto de penalti. El resto del partido bastante tuvo con parar a un Sabi desmelenado, con ganas y el santo de cara. Aparte de los seis goles, pudo entrar alguno más, sobre todo un remate de Blasco a bocajarro que el meta despejó con muchos apuros y evitó el gol seguro. Blasco marcó otro gol, pero fue anulado por fuera de juego.
El equipo desde el inicio rindió a un gran nivel, se dice cuando se consiguen goleadas, que el rival no fue rival. O como me decía al oido un espectador, "estos chavales son muy buenos y se dejan llevar, no meten el pie ni para disparar" Claro el rival no fue lo esperado, pero no porque no sepan jugar o sean facilones, la culpa la tuvo el Sabi que los arrolló desde el principio hasta el final. No dejándoles realizar su forma de jugar y rompiendo el partido con goles y fuerza. Si hubiera habido otro rival, seguramente hubiera pasado lo mismo. El Sabi fue mucho Sabi
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